En las organizaciones empresariales, es común escuchar a sus altos ejecutivos hablar acerca de los objetivos estratégicos y la necesidad de que los mismos deban ser alcanzados.
Para dar cumplimiento a estos objetivos, es requisito «sine qua non» contar con una estrategia que funcione como un hilo conductor dentro de la organización y que ésta permita integrar a todas sus áreas funcionales en pro de la consecución de las metas planteadas.
Sin embargo, en ocasiones se tiende a confundir conceptualmente lo que define a: Objetivos Estratégicos con la Estrategia Empresarial. A grandes rasgos, el primero se refiere a los resultados finales que la empresa espera obtener en un tiempo determinado. Generalmente los Objetivos Estratégicos se platean en un lapso de 5 años y responden a una medición de cumplimiento cuantitativa.
Por su parte, la Estrategia Empresarial, son las distintas alternativas y opciones que una organización elige para alcanzar los Objetivos Estratégicos.
En la Estrategia Empresarial se define el cómo, con qué y cuáles serán los medios a ser utilizados para su ejecución. Igualmente, es común encontrarse en las grandes corporaciones, tantas estrategias como objetivos hayan sido definidos.
Ahora bien, el mundo del Marketing Digital no escapa de lo planteado anteriormente. Hemos detectado en recientes trabajos de consultoría realizados a organizaciones, ambigüedades en el planteamiento de los Objetivos Estratégicos de Marketing Digital y la Estrategia planteada para lograr alcanzarlos; identificando que los resultados suelen manifestarse con cierto grado de frustración, acompañados de pérdidas financieras importantes para estas organizaciones.
En consecuencia, es importante que el Marketing Digital se acople a las metodologías mundialmente reconocidas para la definición de sus estrategias y planificación empresarial, y no se animen a transitar por escenarios no probados y/o no certificados. Estas metodologías garantizan, si son bien encausadas, una identificación temprana de posibles desvíos en la aplicación de estrategias para el cumplimiento de los objetivos establecidos.
Los dueños de empresas, altos ejecutivos, gerentes encargados y todos aquellos responsables de la definición de estrategias de marketing digital y/o objetivos estratégicos de marketing digital, deben revisar de manera periódica y sistemática su ejecución y cumplimiento, así como también revisar los modelos empresariales utilizados en caso de encontrar inconsistencia entre los resultados obtenidos y los resultados esperados.